lunes 27 de octubre de 2025

Elecciones 2025

Optimismo en el mercado inmobiliario tras el resultado electoral

El Gobierno de Javier Milei es el claro ganador de la jornada electoral. El sector del Real Estate anticipa un reacomodamiento de precios y la vuelta otra vez del crédito hipotecario tras el parate previo a las elecciones.

Por el resultado de las elecciones y la consecuente baja del dólar, el mercado inmobiliario se prepara para un reacomodamiento inmediato. Así lo asegura Mariana Stange, titular de Mariana Stange Real Estate, quien anticipa una nueva dinámica en la compra, venta y alquiler de propiedades. 

“Con las noticias de ayer esperamos una caída del dólar y un impacto positivo en los mercados que generará un reacomodamiento inmediato en el real estate”, señala. 

En un país donde el ladrillo es sinónimo de resguardo, la previsibilidad suele actuar como un disparador. “Cuando hay mayor estabilidad se aceleran las decisiones de compra y también de alquiler. Esperamos más consultas, más visitas y, sobre todo, el retorno del inversor que busca blindar su capital en activos reales”, destaca. 

Para Stange, el ladrillo sigue siendo una cobertura natural para el argentino: “Es tangible, patrimonial y tiene potencial de renta y apreciación. Esperamos una intención de invertir creciente y un mercado que tienda a estabilizarse luego de los temblores del último trimestre”. 

El clima de mayor previsibilidad también podría marcar un punto de inflexión para los desarrolladores. “Desde nuestro sector siempre pedimos un contexto con indicadores más estables, porque eso destraba proyectos que naturalmente se frenan ante la incertidumbre. La construcción es una industria altamente sensible al humor económico y a la disponibilidad de capital”, explica. 

De acuerdo con Stange, la reactivación será “selectiva”, al menos en un primer momento. “Veremos movimiento en segmentos bien ubicados y en desarrollos mixtos que incorporen soluciones para el trabajo híbrido, con diseños que prioricen bienestar, eficiencia y sustentabilidad. Los proyectos que dialoguen con la nueva demanda serán los primeros en moverse.” 

Respecto del crédito hipotecario, la especialista es clara: “Es el gran habilitador para ampliar y dinamizar el mercado”. Pero advierte que para lograrlo se necesitan tres condiciones básicas: reglas claras, estabilidad y productos financieros que protejan al tomador. “Si aparecen señales concretas desde el sistema financiero y el gobierno va en esa dirección, si baja la confrontación y empezamos a ver alianzas en favor de políticas de largo plazo, la demanda se multiplicará y el mercado se moverá.” 

Con la mirada puesta en ese horizonte, Stange afirma que “desde el sector inmobiliario estamos preparados para un período de tendencia positiva. Nuestro sector se ha profesionalizado y está listo para mostrar todo su potencial” 

Para Oscar Puebla, arquitecto, broker y director de Puebla Inmobiliaria, la demanda de inmuebles no se detuvo en los últimos meses, y todo indica que ahora se consolidará. 

“En verdad, la compra de inmuebles de contado no se detuvo a pesar de los ruidos del mercado”, sostiene. “Por supuesto, hoy va a continuar y seguirá aumentando la demanda. Los dólares están en baja y los ladrillos siguen siendo un resguardo de valor seguro.” 

Puebla considera que el mercado argentino, dolarizado y acostumbrado a navegar turbulencias, encuentra en cada ciclo de estabilidad una oportunidad.  “El ladrillo siempre gana cuando el dólar se calma. Es un reflejo de nuestra cultura económica. El argentino confía en lo tangible, en lo que puede ver y tocar.” 

El especialista también observa una ventana de oportunidad en los desarrollos en marcha. “Sabíamos que el valor de los edificios a estrenar hoy es el piso del mercado a futuro. Solo hay que mirar los valores del metro cuadrado en países limítrofes, que están muy por encima del nuestro. Argentina es, sin duda, una excelente oportunidad de inversión”, afirma. 

Optimista, Puebla interpreta el nuevo contexto como un punto de inflexión: “Estamos en camino hacia un país más abierto y confiable. Los valores de hoy van a parecer ridículos en pocos años. Sugiero que quien tenga intenciones de comprar un inmueble lo haga pronto, porque los precios todavía no han subido tanto.” 

En cuanto al crédito hipotecario, su análisis también es alentador. “Hoy, con el diario del lunes, está más claro que nunca: el superávit fiscal y la baja inflación permitieron que el mercado muestre la solidez de las medidas adoptadas”, explica. “A pesar del ruido político de los últimos meses, la inflación se mantuvo en los términos esperados. Las tasas en los bancos tenderán a bajar y, en poco tiempo, volveremos a tener créditos hipotecarios que le den al mercado el impulso que conocimos en otras épocas.” 

Confiado en la hoja de ruta económica, Puebla concluye: “El Gobierno demostró que sabe lo que hace y hacia dónde va. Los bancos, de a poco, volverán a trabajar de bancos. Y el mercado inmobiliario, que siempre fue un termómetro de confianza, lo va a reflejar".

A su tiempo, Hugo Koifman, CEO de Branson Real Estate, resaltó que el nuevo escenario aporta prudencia y previsibilidad al mercado. La suba de acciones y bonos, junto con la baja del riesgo país, allana el camino para una reactivación del crédito y mayor dinamismo en el sector inmobiliario. 

El resultado electoral del domingo fue, según Hugo Koifman, “muy importante porque le trae prudencia y estabilidad al mercado”. 

“La estabilidad significa que el dólar, más allá de que haya bajado, va a tender a mantenerse quieto. Que esté un poco más arriba o más abajo no cambia el panorama: lo relevante es que no haya grandes fluctuaciones”, explicó, y enfatizó: “la estabilidad del dólar contribuye a que el proceso de baja de la inflación continúe” 

El ejecutivo observó que las acciones están subiendo significativamente, lo que interpreta como una señal de confianza: “Tanto los inversores locales como los extranjeros han visto el resultado como algo muy positivo”. 

El otro gran es, según su visión, el repunte de los bonos que “están subiendo, especialmente los de largo plazo”. 

“Eso le da previsibilidad al mercado a futuro. Que los bonos suban es muy importante para todos, porque hace que el riesgo país baje. Si el riesgo país baja, el costo de financiamiento para la Argentina también baja, y el país puede acceder a los mercados con mayor facilidad”, precisó Koifman 

En ese contexto, el empresario indicó que “bonos en alza y riesgo país a la baja hacen que la posibilidad de que la gente tome crédito sea mucho más alta”. 

“Los bancos están más predispuestos a ofrecer financiación a mediano y largo plazo, con tasas razonables y fijas. Y el mercado está tranquilo. Quien toma un préstamo siente que lo va a poder pagar, porque la economía está estable”, remarcó. 

Para el CEO de Branson Real Estate, la palabra clave es “estabilidad”. 

“Estabilidad en el tipo de cambio, en el mercado accionario, en el mercado de bonos y en el riesgo país. Esa estabilidad es fundamental pues hace que baje la inflación, que disminuya la pobreza y que todo funcione mejor para todos”, amplió 

El impacto también se siente en el mundo empresarial. “Las empresas de la Argentina necesitan tener estabilidad para poder poner precios, vender y financiarse. Las empresas en general toman financiación del mercado local en pesos o dólares, o con diferentes metodologías, y las tasas a la baja hacen que sea más fácil financiarse y más económico”, concluyó.