Sector Inmobiliario
La importancia del arte en proyectos urbanísticos
A través de las producciones, los artistas tratan los temas que los atraviesan, ya sean de interés para el público que consume las obras, temas personales o políticos, entre otros. Las obras, muchas veces, expresan la forma de pensar, reformular e incluso de descubrir y manifestar nuevos puntos de vista, así como también representan formas de entender el mundo y de vincularse con la sociedad.
Existen diversos tipos de colecciones, y esto vuelve al universo de la compra de obras de arte una plataforma muy rica y variada, ya que cada comprador va afinando sus intereses, lo que busca en el arte y sobre todo, aquello que lo interpela.
“La comunidad artística es sumamente amplia, y está cruzada por profesionales de todo tipo, no solamente por artistas. Los eventos reúnen un público variado, donde se dan encuentros y cruces de ideas, así como también los artistas tienen comunidades dentro de sus talleres, es decir, el arte congrega a las personas porque comparten el amor por el arte”, expresa Eleonora Molina, Directora de Miranda Bosch Gallery. Y agrega que: “ya sea en una galería, museo, taller o acción, el arte invita a ser parte desde el espacio en que se quiera y pueda. Como coleccionista, pensador, amigo, artista, crítico, curador, gestor, o cualquier profesión, en realidad, el arte invoca algo que excede las definiciones y genera pertenencia donde se junte un grupo de personas a compartirlo”.
Beneficios y ventajas del arte en los inmuebles
Convivir con una pieza de arte es una invitación a entender el mundo de otra manera. Los artistas prestan sus perspectivas, soluciones y reflexiones sobre las problemáticas que los rodean a través de sus innumerables obras.
Además de la reflexión y el goce estético que provocan las obras, son una verdadera inversión. Si se encuentran instaladas en los espacios comunes de los inmuebles, aumenta el valor del edificio al sugerir elegancia, le da al espacio un perfil high end, pero también si se compran piezas con valor histórico o de un artista en ascenso, éstas pueden aumentar su valor de mercado, dándole más valor monetario al edificio, además del simbólico de tener una pieza de arte. Las obras son parte de una colección privada en un domicilio, ya que son gozadas por sus dueños, pero principalmente, consisten en una inversión que, en muchos casos, es asegurada.
“El arte decora, aumenta el valor monetario y simbólico de un hogar y trae ideas, reflexiones y visiones del mundo a quienes pasan por el hogar y edificio. Asimismo, el arte cambia la vida de las personas porque al incorporar una pieza dentro de un hogar, ingresa una nueva voz. Se trata de un integrante más de la familia, y como tal provoca sensaciones de todo tipo, dependiendo de la persona y de la obra. Puede inspirar, dar felicidad, traer recuerdos e incluso nostalgia”, comenta Molina, Directora de Miranda Bosch Gallery.
Evolución del arte
El arte muta constantemente desde el inicio de los tiempos porque acompaña el crecimiento y la transformación del ser humano. Actualmente, el cruce con la tecnología, la inteligencia artificial y la experimentación con nuevos soportes y lenguajes alternativos se vuelve muy común. Cada vez es más frecuente encontrar en museos o galerías, obras producidas enteramente por máquinas o donde, por ejemplo, la forma, sonido o aspecto final lo da un algoritmo.
“No se habla de evolución porque eso implica que lo anterior está involucionado, sino que se habla de transformación porque el arte está atravesado por las problemáticas contemporáneas y por el uso de las nuevas tecnologías que provocan cambios o en su defecto, una nueva modalidad de crear y entender el arte”, finaliza la Directora de Miranda Bosch Gallery.